18 de junio de 2006

Como una premonición...


...anoche fui al teatro. Unos amigos nos invitaron a ver una obra en la Casa de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (CELARG) llamada "Falsarios". Yo aprendí a que antes de decir si algo es bueno o malo, lo cual es un juicio de valor que pretende calificar para que otros se vean influidos por mi criterio, primero digo si me gustó o no me gustó, lo cual no tiene nada que ver con que sea buena o mala sino con una sensación menos racional, mucho más visceral, del momento que pasé anoche.
Y... la obra me gustó. No es que haya sido el momento más arrecho de la historia del teatro en mi corta vida, pero la disfruté, me pareció entretenida -entretenidísima, dirían mujeres como Valentina Quintero, haciendo énfasis en la í acentuada y subiendo el tono, y manteniendola por un instante, así, sifrino como a mi me gusta-. Me reí un rato, sufrí otro rato -típico de las tragicomedias autóctonas y anecdotarias de hoy en día-, y mi mayor sufrimiento fue pasar una hora sentado en una silla caótica, vencida, que era más una invitación a salir corriendo de la sala que a disfrutar de la función.
En fin que ni siquiera sabía que la palabra "Falsarios" existía en el diccionario, así que decidí buscarla en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, que dice así:
falsario, ria.
(Del lat. falsarĭus).
1. adj. Que falsea o falsifica algo. U. t. c. s.
2. adj. Que suele hacer falsedades o decir mentiras. U. t. c. s.
(No sé que significa U. t. c. s., si alguien sabe, le agradeceré en el alma que me explique).
Bueno, el asunto es que la obra va de una de esas situaciones que parece que empiezan a ser cada vez más repetitivas en nuestro mundo moderno. Esta es una de las facetas de aquello que dicen las mujeres de que "ya no quedan hombres por ahí". Lo que pasa es que antes decían que no habían hombres porque no son caballerosos, porque dejaron de ser el sostén del hogar para ser el mantenido de la casa... Pero la excusa de ahora es que aparentemente hace falta quien invente y patente una pruebita casera muy rápida, así como las pruebas de embarazo, que garantice que ese hombre que me estoy llevando a la casa no sea marico. Una gotica de orina, semen, sudor, un pelito, lo que sea, y a los dos minutos usted se entera si este hombre es un macho de verdad verdad o si, muy por el contrario, es un macho que lleva su nazareno a cuestas.
Todo esto aderezado por el peo que significa que una mujer se entere, luego de 8 o 9 años de un dudoso matrimonio, que el desinterés de su marido no se debe a la gordura que ella intenta hacer desaparecer con la ayuda de cuanto tratamiento se le ocurra a su muy famoso doctor -que además está requetebueno-, sino que la falta se debe a que justamente ese señor con la que la doñita tuvo la desdicha de casarse en mala hora tiene tres años de amores con el mismísimo doctor que la viene torturando para que su grasa sea cosa del pasado.
Y, como una premonición, ahí estaba yo viendo la historia de la vida que decidí no vivir. Porque mi cuento es el de un hombre que agarró sus cachachás y le dijo a su madre "no, señor, no me caso, o mejor dicho, sí me caso, sí me mudo, y hasta muchachos quiero tener, pero no es ni con Carolina, ni con Gabriela, ni con Luisa... nada de eso. La cosa es con Richard, y si te gusta bien y si no también".
Porque desde hace rato me dejé de guevonadas. Porque no, compadre, yo, de falsario, nada.
Besos y abrazos a quien corresponda.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Pana..... asi se lo hiciste, asi debe ser.

El "Dulzor de Ostras" dijo...

Bienvenido al Club!!!

Volveré

Cafecontorta dijo...

Valiente decisión, aunque a veces es incluso mas complicada de lo que te tocó a ti. Ponte en los zapatos del que descubre su orientación alternativa cuando ya está casado, con hijos, amando a su esposa y sus chamos pero deseando complementar esa parte de la líbido que estaba dormida. Es casi imposible quemar las naves! Mucha de esa gente merece más mi conmiseración que el atreverme a llamarles "falsario".

Silmariat, "El Antiguo Hechicero" dijo...

U. t. c. s. Utilícese también como sustantivo.

Silmariat, "El Antiguo Hechicero" dijo...

El amor, la vida nos presenta, cuando menos lo esperamos, otras comarcas, otros caminos.

El comentario de Saldivia es tan sólido que yo no tengo nada que agregar.

Todo lo mejor para ti, siempre.

Jogreg dijo...

Pablo y josé: Claro, no fue que le dije a mi mamá esas palabras exactas, pero ese día estuvimos discutiendo unas tres horas, hasta que cancelé la reunión cuando comenzó a decir barbaridades (cosas como "lo mato" o "que no se me atraviese en el carro"). Pero el efecto es básicamente el mismo.

Dulzor: gracias por la bienvenida...

Jose: ¿Sabes qué no puedo? Tener conmiseración de un cobarde. Porque lo que me molesta realmente del tema es que los maricos no somos unos discapacitados (que por cierto, tampoco merecen conmisceración de nadie: se han visto casos). Claro que es válido que uno descubra ciertas cosas en un momento poco adecuado, pero esos descubrimientos deben ser compartidos con quien uno ama, comenzando por la pareja, porque si no, ¿quienes somos realmente? ¿qué pareja es esa que no se puede confiar hasta lo más mínimo? Claro, también se necesita de un crecimiento y de una madurez como pareja que no todos tienen, porque seguimos teniendo miedo de que "si digo lo que siento, capaz y me dejan de querer". No, pana, no estoy de acuerdo con eso. Dejar de ser falsario pasa por tener bolas y un poquito de seriedad con la vida.

Hechicero: ¿qué haríamos sin amigos como tú? ¡¡¡CHAS GRACIAS!!!

Naky Soto Parra dijo...

Yo me sumo al comentario del Arquitecto. No a todos les cae la locha Jo, a veces los costos son tan altos, y la autoestima, y la renuncia al amor, y tantas cosas...

Eso pues, me sumo a Saldivia y a mi hechicero favorito.

Un abrazo, mañana es la cosa...

gustavo dijo...

Bueno buscando aqui y allá, luego de poner mi blog consigo el tuyo y de verdad que me tiene gratamente impactado todo lo que escribes. Qué bueno alguien claro en su vida! ojalá todos pensarán como tú

Jogreg dijo...

Gustavo: gracias por pasar por acá y por tan bonitos comentarios. Pronto paso por tu blog para conocerlo.

Naky: Si los costos de tu decisión son tan altos, no tomes la decisión y ya está. Asume tu barranco y listo. Lo peor que puede pasar es que seas infeliz el resto de tus días y qué carrizo, fue tu decisión. Pero lo que no se puede aceptar es que la decisión sea "echo mi canita al aire con mi macho de vez en cuando, para matar el morbo que me genera la cosa" pensando que eso podrá mantenerse así toda la vida. Porque entonces terminas siendo un falsario. Y el problema del falsario es que piensa que nunca será descubierto, pero corres el riesgo de que lo seas, y entonces no solo lo pasas mal tú, sino que lo pasa mal el resto del mundo, no solo por marico, sino por falsario. Al menos asumiendo los costos altos te puedes ir con la cabeza un poco más en alto, sintiendo que al menos fuiste honesto y valiente. Marico, pero honesto y valiente, y no marico, mentiroso y cobarde.

rafico dijo...

Pienso que somos una escala de grises en nuestros gustos, que nos hemos domesticado con el lenguaje, y por ello somos susceptibles a catalogarnos.

Bien por ti.
Pero entiendo el comentario de Valdivia, ser timoratos también hace parte de nuestra humanidad.
-----------
Respecto al post del espejo.
Creo que para nuestra comodidad creamos arquitecturas explicativas de lo que nos acontece, es decir, hacemos analogías convenientes para entender cosas, pero no hay que olvidar que son solo eso, modelos que idealizan una parte de la vastedad de nuestra realidad.
Creo que reflexionar creando arquetipos, pueden mutilar matices de lo que somos.

Un abrazo

Câline dijo...

Guau!! Excelente post, excelentes comentarios y muy bien tratado el tema... a diferencia, estoy de acuerdo con Jogreg, o eres o no eres, o te asumes y te responsabilizas de tus cosas o no... Nada peor que ser un gusano baboso que se debate en las mentiras y ni disfruta su realidad ni su vida alterna. Además... hace sufrir a otros... figúrate si tiene hijos... no es justo jugar con los sentimientos de los demás.
Saludos!!

Jogreg dijo...

Esto lo escribió Silmariat, El Hechicero. Menciona que lo publicó acá, pero nunca me llegó el mensaje de la publicación, así que lo coloco yo...

Silmariat dijo:
Jogreg y Câline:

No es cuestión de ser valiente o no.

Existimos personas las cuales no tenemos herramientas como para explicarnos que demonios nos sucede. No hemos leído ningún librito de Louise L. Hay o uno de Wayne Dyer. No sabemos qué hacer y nos encerramos en 4 paredes, nos quedemos en un rincón, temblando y con horror de vernos al espejo, en la mañana, cada vez que nos cepillamos los dientes.

Existimos personas que somos tan afortunados y tenemos media ferretería a nuestra disposición. Y hasta las prestamos o vamos, por la vida, de fontaneros ayudando a parir y sacamos hasta petróleo con un corta uñas.

Eso no nos hace ni mejores ni peores.

Existen circunstancias, formas de vida, lo que es no lo es, que nos hace mentir…, esas mentira blancas como para tomarnos un poquito de tiempo, para respirar y ver que hacemos. Terrible error –puede ser-, pues una mentira lleva a la otra, y a la otra, y a la otra y cuando vemos tenemos toda una Cordillera de los Andes de tantas mentiras. Tarde o temprano la verdad sale o no. A veces sucede ese prodigio y la mentira se convierte en una verdad sólida, tamaño familiar, he visto casos, he sido afortunado en mi vida. Pero esa es otra historia.

Imagínense lo difícil que puede ser para un círculo descubrir, de repente, como quién no quiere la cosa, que la vida es cuadrada. Que toda su vida es una mentira, que incluso se ha mentido, que tiene que reestructurar pues todo el edificio se le cae. Todo tiene su proceso, lento, largo, instantáneo, arduo, de “Ay Dios mío…, qué vaina!!!, de “Y ahora, qué”..., cada quien tiene su propio ritmo...

Volviendo a lo que nos interesa, les pregunto: Eso no es parte de nuestro aprendizaje, esto no es parte del arte de vivir, de crecer?

Si la gente no vive según nuestras metas, normas no dejan de ser menos gente. Ojala la gente tenga nuestros triunfos, sonrisas, alegrías y no sufra nuestros fracasos, lágrimas, dolores. Pero, amigos míos, eso es imposible. Ellos son ellos y nosotros, simplemente, nosotros. La vida es un teatro…, ya lo digo Shakespeare, hace algunos días, entonces disfrutemos de ese teatro.

Recuerden que la gente nos sirve para vernos y confortarnos, ese trabajo es tan íntimo y tan maravilloso. Bueno, por lo menos a mí me encanta y sólo por ello merece la pena pasar por este mundo.

Todo lo mejor para Ustedes, siempre.

Anónimo dijo...

Este mensaje es para Gogreg.
U.t.c.s significa "Utilizado(a) también como sustantivo.

Saludos
Berrocal